sábado, 10 de enero de 2009

abrí la puerta y me encontre con la soledad de nuevo

ante mis dudas de volver o no... algo dentro me decía que si volvía me haría más fuerte, que podía con ello...

Llegué al piso abrí la puerta y ya estaban todas mis compañeras alli. Corrí hacía ellas buscando sus abrazos y sus beso que tanto me acompañaron en los momentos mas duros de mi vida... Comí a besos a mis dos compañeras, pero me faltaba la tercera... y no por ser la última era menos, sino todo lo contrario, en este año y medio me había demostrado que había rebosado los límites de cualquier amistad y la quería como si de mi propia hermana se tratase... Me dió dos besos, dos besos amargos, sin entusiasmo alguno en su cara... Detrás aparecio su madre e hizo lo mismo. Metí mi equipaje en mi habitación con ayuda de mi padre y saqué tres regalitos que les había traido: tres brujitas de la suerte.

Fuimos al salón, para hablar todos, cenamos,... y esta compañera mia la notaba muy estraña conmigo... no entendía muy bien que pasaba...

Poco a poco se fueron a dormir todos y nos quedamos en el salón mi padre, su madre y ella. -¿Qué tal estas? - me dijo su madre. - pues bien, volviendo a empezar - le contesté intentando transformar las lagrimas de mi alma en una pequeña sonrisa. - y bueno ¿ves normal la actitud del ultimo dia que tuviste? ¿como pretendes volver aquí como si nada? (aqui podreis ver el que) http://flotandocongravina.blogspot.com/2008/12/el-calor-que-necesita-un-copo-de-nieve.html pues bueno, es algo de lo que no quiero volver a hablar... pasó y ya está. Ahora estoy bien y quiero seguir adelante...

Parece que esas palabras encendieron más aún a la madre y a su hija que de repente me empezaron a reprochar que era una desagradecida por no saber agradecer todo lo que habia echo su hija por ella... que por mi culpa está muy mal.

En ese momento se me congeló el corazón. Miré a mi compañera y estaba mirando el suelo. Mi padre saltó diciendo que tenían que entender en que estado estaba y que en ese momento no era muy consciente de lo que decía.

La noche terminó con una gran discusión...


Al día siguiente, se fue su madre e intente hablar con ella. Me repitió todo lo que había dicho anoche... que ella estaba muy mal y estaría mejor si yo no estuviera aquí.

Venía con los ojos llenos de ilusión por empezar de nuevo aquí... por verlas... por reirnos... por bailar el pasillo como tontas con la musica a tosa hostia... por dormir un dia todas juntas en mi cama... por sus besos de buenas noches... por ver esas sonrisas...

Esto paralizó todas mis espectativas. Mi padre me decía que volviera casa con ellos, que ya tendría tiempo de acabar la carrera... Estuve estos días derrumbada, mi padre no quería verme así pero no podía evitarlo... Pero me levanté de la cama y le dije que se podía ir, que quería estar aquí y alomejr con el en el piso no se solucionaria nada...

A la mañana siguiente, me fui a las practicas del hospital y vi una nota de él sobre mi cama: "Ordena tu exterior, todas las cosas, las personas... Organizando tu alrededor te ayudará encontrar el interior". Te quiero mucho. Acuerdate de la promesa". y una foto de él de canret.
La promesa consistía en que la primera vez que me encontrara mal, le llamaría y volvería con ellos...

Lo siento papa, por no cumplir tu promesa bien, porque sigo acostandome todas las noches llorando.En mi mente sólo aparece mi compañera de piso. ¿Tan difícil es entender esa situación? ¿Tan dificil es "perdonar" a alguien que no sabía lo que decía?

Lo siento papa...

4 comentarios:

  1. lo siento mucho niña¡ de verdad te lo digo y también te digo que una persona que no sepa entender tu situación no vale la pena y tampoco vale la pena que te entristezcas por su culpa. dale tiempo y déjala que recapacite que eguro que lo que dijo era más obra de su familia que propia. tú sé fuerte.muchos besos y no llores.

    ResponderEliminar
  2. Sinceramente creo que todo esto tiene solución. Tú misma reconociste que tu manera de actuar aquel día no fue correcta, pero te sirvió para darte cuenta de que no estabas sola. Yo te recomendaría que hablaras con ella, porque el único motivo por el que veo que pueda sentirse ahora tan mal es porque le importas y no le gustó verte así. Creo que con una conversación calmada (nada de discusiones) y, a lo mejor, una discupla por tu parte por ese comportamiento (pero siempre explicando el por qué lo hiciste, cómo te sentías). No creo que una persona que tanto te ha aportado desaparezca así como así.

    Ánimos! y ya nos contarás como va yendo todo

    ResponderEliminar
  3. Creo de haber comprendido el sentido de esta historia.
    No lo sé si conoces la lengua italiana pero te dedico en todo caso la canción que esta tarde ha sido publicada en mi blog.
    Suerte.

    ResponderEliminar
  4. Dale tiempo, los dolores del alma se pasan si das tiempo...

    besicos

    ResponderEliminar